Buena potencia de fuego, buen blindaje y buena movilidad convirtieron al S35 en uno de los mejores tanques de la época. Sin embargo, la pequeña torreta forzaba al comandante a manejar múltiples tareas al mismo tiempo: buscar objetivos enemigos, apuntar y recargar el cañón y coordinar las acciones de la tripulación. Esta carga de trabajo reducía su conciencia situacional y reducía la efectividad del vehículo en el campo de batalla. Para cuando Francia capituló el 22 de Junio de 1940, un total de 427 vehículos habían sido fabricados.
Comandante
Artillero
Operador de radio
Cargador
Las características especificadas son para vehículos con tripulantes entrenados al 100 %.